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viernes, 18 de octubre de 2013

Mito Chino De La Creacion


Una característica única de la cultura china es la relativamente tardía aparición en la literatura de los mitos sobre la Creación, que lo hacen tras la fundación del confucionismo, el taoísmo y las religiones populares. Las historias tienen varias versiones, a veces contradictorias entre sí. Por ejemplo, la creación de los primeros seres es atribuida a Shangdi, Tian (el cielo), Nüwa, Pangu o el Emperador de Jade.
En todo el Extremo Oriente y Oceanía, existía un dualismo cosmológico oponiéndose dos principios, por una parte la luz, el sol y el fuego, por otra parte la oscuridad, la luna y el agua. Generalmente, un pájaro representaba al primer principio. En China, se trataba de un cuervo. El pájaro solar es uno de los temas privilegiados de la dinastía Shang, la primera dinastía china cuya existencia se certifica por medio de la arqueología. Una serpiente, como un animal acuático, representaba al segundo principio. La madre de Shun, uno de los soberanos míticos de China, pertenecía al clan de la serpiente, y su padre pertenecía al clan del pájaro. Por lo tanto, Shun era resultante de la unión de los dos principios. Este mito ilustra también el totemismo de la antigua sociedad china, según el cual cada clan tenía un animal antepasado, así como la exogamia, que exigía que los esposos fueran provenientes de clanes diferentes.
Xiè era el antepasado de Shang y su madre se llamaba Jiandi. Un día, fue a bañarse con sus sirvientes en el río de la colina oscura. Un pájaro negro (probablemente una golondrina o un cuervo) pasó llevando un huevo multicolor en su pico. Lo dejó caer. Jiandi lo tomó y lo puso en su boca, pero lo tragó por descuido. Tras esto, concibió a Xie. En este relato, se trata de una forma particular de la unión de los dos principios cósmicos, puesto que este mito hace intervenir por una parte al agua y a la oscuridad, y por otra parte un pájaro.
Shangdi (上帝), aparece en la literatura hacia el 700 a. C. o antes (la fecha depende de la datación del Shujing, el "Clásico de la Historia"). Shangdi parece tener los atributos de una persona, pero no se le identifica como creador hasta la dinastía Han.
La aparición de Tian (天), el Cielo, en la literatura presenta el mismo problema que Shangdi, dependiendo también de la fecha del Shujing. Las cualidades del Cielo y de Shangdi parecen unirse en la literatura posterior hasta ser adorados como una sola entidad (皇天上帝), por ejemplo en el Templo del Cielo de Pekín. La identificación de los límites entre uno y otro, todavía no ha sido resuelta.
Nüwa aparece en torno al año 350 a. C. Su compañero es Fuxi y a veces se los adora como los ancestros últimos de la humanidad.
Pangu aparece en la literatura no antes del año 200 de nuestra era. Fue el primer creador. Al comienzo sólo había un caos sin forma del que surgió un huevo de 18.000 años. Cuando las fuerzas yin y yang estaban equilibradas, Pangu salió del huevo y tomó la tarea de crear el mundo. Dividió el yin y el yang con su hacha. El yin, pesado, se hundió para formar la tierra, mientras que el Yang se elevó para formar los cielos. Pangu permaneció entre ambos elevando el cielo durante 18.000 años, tras los cuales descansó. De su respiración surgió el viento, de su voz el trueno, del ojo izquierdo el sol y del derecho la luna. Su cuerpo se transformó en las montañas, su sangre en los ríos, sus músculos en las tierra fértiles, el vello de su cara en las estrellas y la Vía Láctea. Su pelo dio origen a los bosques, sus huesos a los minerales de valor, la médula a los diamantes sagrados. Su sudor cayó en forma de lluvia y las pequeñas criaturas que poblaban su cuerpo (pulgas en algunas versiones), llevadas por el viento, se convirtieron en los seres humanos.
El Emperador de Jade ((玉皇), aparece en la literatura después del establecimiento del taoísmo. También se le representa como Yuanshi Tianzun (元始天尊) o como Huangtian Shangdi (皇天上帝).

Mitología China

La mitología china es el conjunto de relatos fantásticos relativamente cohesionados de la cultura de la antigua China. Muchas de sus leyendas toman lugar durante el período de los tres augustos y cinco emperadores. Mucho de la mitología China es única, aunque comparte bastante con Japón y Corea debido a su influencia en la antigüedad.
La Mitología China se conoce gracias a textos que datan esencialmente de la dinastía Han. Al no tener más de 2.000 años de antigüedad, estos escritos apenas pueden clasificarse como recientes. Además, fueron redactados por doctos que a veces reinterpretaron la mitología de acuerdo con sus concepciones filosóficas. De este modo, transformaron a los más importantes dioses en soberanos virtuosos que reinaban en tiempos antiguos. También asociaron a sus dioses con las cinco direcciones (es decir, los cuatro puntos cardinales y el centro) según una cosmología elaborada durante la Antigüedad temprana.
Se puede tener una idea de lo que era la mitología china "original" comparándola con los relatos de otros pueblos en el Extremo Oriente. Al extender esta comparación a toda Eurasia, se puede apreciar que una gran parte de esta mitología es de origen indoeuropeo. Posee pues semejanzas totalmente sorprendentes con las mitologías germana, griega o eslava. Eso se debe a la invasión de China por un pueblo indoeuropeo, los tocarios, hace más de 3000 años.

Troya


miércoles, 9 de octubre de 2013

Apolo "El mil Amores" (Mitología Griega)

Mitos griegos: Apolo y Dafne.

Mitología japonesa

La mitología japonesa es un sistema extremadamente complejo de creencias. El panteón Shinto por sí solo se compone de una colección de más de 8 000 000 kami ("dioses" o "espíritus" en japonés). A pesar de la influencia de la civilización china antigua, una parte muy importante de la religión y mitología japonesa son únicas. Contiene tradiciones Shinto y budistas así como creencias populares agrícolas. Por otra parte, a diferencia de la mitología griega, nórdica y egipcia, es relativamente difícil distinguir cuál es verdaderamente un "mito" para los japoneses.
Los mitos japoneses convencionales se basan en el Kojiki, en el Nihonshoki y algunos libros complementarios. El Kojiki que literalmente significa "registro de cosas antiguas" es el libro más viejo reconocido sobre mitos, leyendas, y la historia de Japón y el Nihonshoki es el segundo más antiguo. El Shintoshu explica orígenes de deidades japonesas desde una perspectiva budista mientras que el Hotsuma Tsutae registra una versión diferente sobre la mitología.
Un resultado notable de la mitología japonesa es que explica el origen de la familia imperial, y les representa como descendencia divina. La palabra japonesa para Emperador en Japón, tennō (天皇), significa el "Soberano celestial" (el carácter 天 significa "cielo").

Dioses De La Mitología Egipcia

Las principales divinidades estaban organizadas en cinco grupos diferentes:
La Enéada de Heliópolis “Las almas de Tot”: Atum, Shu, Tefnut, Nut, Geb, Isis, Osiris, Neftis y Seth; cuyo dios principal es Atón.
La Ogdóada de Hermópolis: Nun, Nunet, Heh, Hehet, Kek, Keket, Amón y Amonet; de donde surgió el dios Ra.
La tríada de Elefantina: Jnum-Satis-Anuket (donde Jnum es el dios primordial).
La tríada de Tebas: Amón-Mut-Jonsu (donde el dios principal es Amón).
La tríada de Menfis: Ptah-Sejmet-Nefertum (donde Ptah era el dios principal; es inusual el hecho de que los dioses no estaban relacionados antes de que ésta fuera formalizada).

Mientras los líderes de los diversos grupos ganaban y perdían influencia, las creencias dominantes se transformaban, combinaban y sincretizaban. Ra y Atón se convirtieron en Atón-Ra, con las características de Ra como dominantes, y posteriormente Ra fue asimilado a su vez por Horus, como Ra-Horajti. Después de que Ptah se convirtiera en Ptah-Seker, fue asimilado por Osiris, convirtiéndose en Ptah-Seker-Osiris.
Con las diosas sucedió lo mismo: Hathor asimiló inicialmente las características de otras diosas, pero en última instancia fue asimilada con Isis. Los dioses maléficos fueron amalgamados de la misma forma, como Seth, quien originalmente era un héroe, asimiló todos las características de los dioses malvados, al cual condenaron posteriormente por haber sido elegido como dios protector de los gobernantes hicsos.
Durante la época de influencia helénica sobre Egipto, lo que perduró con más vigor fue la tríada: Osiris, Isis, y Horus; y su enemigo Seth, tal como se ejemplifica en la "Leyenda de Osiris e Isis". La tríada había asimilado muchos de los cultos y deidades anteriores, y cada dios era adorado en su preferente lugar de veneración: Osiris en Abidos, Isis en Dendera, y Horus en Edfu. Incluso en esta etapa, continuaba la fusión, con Osiris como un aspecto de Horus (y viceversa), dirigiéndose paulatinamente hacia el monoteísmo. Sin embargo, el monoteísmo, o henoteísmo, había surgido con anterioridad, fugazmente, en el siglo XIV a. C., cuando Akenatón había intentado priorizar el culto de Atón, en la forma de disco solar, aunque fue violentamente rechazado posteriormente por el clero y el pueblo egipcio.
Según el Canon Real de Turín, varios dioses gobernaron Egipto: Ptah, Ra, Shu, Geb, Osiris, Seth, Thot, Maat y Horus; cada cual durante inmensos períodos, después reinaron los Shemsu Hor durante 13.420 años, antes de surgir la primera dinastía de faraones. Así, los predecesores de Menes ocuparon el trono egipcio durante 36.620 años.

Principales divinidades egipcias:

Mitología Egipcia


La mitología egipcia comprende el estudio de creencias sustentadas en la religión del Antiguo Egipto desde la época predinástica hasta la imposición del cristianismo, cuando sus prácticas fueron prohibidas en tiempos de Justiniano I, en el año 535.

Su desarrollo e influencia perduraron más de tres mil años, variando lógicamente a través del tiempo; por lo tanto, un artículo o incluso un libro, sólo puede resumir la multitud de entidades y temas de este sistema complejo de creencias. La variada iconografía egipcia es muy diferente de la griega o romana: en la mitología egipcia muchas deidades son representadas con cuerpo humano, y cabezas de otros animales.

Historia
Las ideas religiosas de los antiguos egipcios tuvieron dos fases:
Durante la época predinástica, divinizaron aquellos fenómenos naturales que les desconcertaban, o infundían temor, de los que no conocían la razón de su proceder; asociaron estas divinidades con las características de ciertos animales, y los representaron con forma humana aunque conservando rasgos zoomorfos: el halcón en el dios Horus, "el elevado", dios del cielo; el perro egipcio, o chacal del desierto, "el guardián de las necrópolis", se convierte en un dios protector, Anubis; el cocodrilo del Nilo, un peligro constante, en un dios temido, venerado en la región de El Fayum, etc. Además les atribuyeron conceptos humanos, como la relación familiar, por lo que se formaron tríadas compuestas por un dios, su esposa y su hijo, y también pasiones humanas por lo que se les rendía culto dando ofrendas en los templos a cambio de favores solicitados, o recibidos.
A pesar de la agrupación de los pueblos egipcios en las "Dos Tierras": el Alto y Bajo Egipto, cada uno de los nomos (provincias) mantuvo sus deidades protectoras, lo que significaba la veneración a decenas de dioses, que adquirían mayor o menor relevancia según la importancia que tuviese cada ciudad: en Heliópolis se adoraba a Ra, en Tebas a Amón, en Menfis a Ptah y Hator, etc.

Los sacerdotes de los templos principales comenzaron a organizar esta multitud de dioses y a explicar sus relaciones, la creación del mundo, las crecidas del Nilo, etc., ideando y sistematizando las creencias en las denominadas teología Heliopolitana, Tebana, etc., reflejadas en los Textos de las Pirámides, o el Libro de los Muertos, a los que siguió la redacción de otros similares.


Su visión está basada en su propio país, tierra fértil junto a un río y con un desierto alrededor. Por lo tanto el mundo para ellos se dividía en tres regiones:
El Cielo, Nun, morada de los dioses, cuya diosa celeste Nut, "La grande que parió a los dioses", era representada como una mujer con el cuerpo arqueado cubriendo toda la Tierra.
La Tierra, morada de los hombres, la Casa de Geb, el dios creador, representado como un hombre tumbado bajo Nut.
El Más Allá, o Duat, el reino de los muertos, donde gobernó Horus, y posteriormente Osiris, espacio recorrido en su barca solar por Ra durante la noche, y por donde transitaban los espíritus de los difuntos sorteando los peligros.

Seres De La Mitologia Nordica o Escandinava

Los Dioses
Árbol genealógico de los Æsir.
Los pueblos nórdicos adoraban dos clases de dioses, una de ellas y la principal, es la de los Æsir.
En Asgard, el hogar de los dioses, habitaban los Æsir (dioses) y las Asynjur (diosas). Todos ellos componían la asamblea a cuya cabeza estaba Odín, el más noble y el más importante.
Entre otros están Thor, dios del trueno, con guantes de hierro, su famoso martillo, Mjolnir, y dueño de un cinturón mágico; dios de la fuerza muy cercano a Odín en jerarquía. Baldr, hijo de Odín, es el dios de la belleza y la gentileza. Tyr es el dios del combate (suele creerse que ese papel lo cumple Thor, pero no es exactamente así). Bragi es el dios de la sabiduría y la elocuencia; Heimdall es hijo de nueve doncellas y guardián de los dioses; duerme menos que un pájaro y el sonido de su cuerno puede oírse en cualquier lugar del cielo o de la tierra. Höðr es el misterioso dios ciego. Vidar es el dios taciturno, pero el mejor para resolver cualquier conflicto por difícil que sea. Váli es el dios de los arqueros, su puntería es insuperable. Ull es el dios del combate cuerpo a cuerpo. Forseti es el As de la concordia y la amistad. Loki es la desdicha de todos los Æsir y de los hombres; astuto e intrigante, imprevisible y caprichoso, es el dios de la suerte.
Entre las diosas o Ásynjur del panteón nórdico se encuentra Frigg, esposa de Odín, la vidente; Eir, la curandera; Sjöfn, que conduce los pensamientos de los hombres hacia el amor; Var, diosa de los juramentos; Syn, la guardiana de las puertas; Iðunn, esposa de Bragi, que guarda en un estuche las manzanas que morderán los dioses cuando envejezcan.

Los Vanir
Aunque los habitantes originales del cielo eran los Æsir, ellos no eran las únicas divinidades que las razas nórdicas veneraban, pues también reconocían el poder de los dioses del mar, del viento, de los bosques y las fuerzas de la naturaleza. Se denominan Vanir, vivían en Vanaheim y gobernaban sus dominios a su deseo.
Njörðr rige el viento, el mar y el fuego, y tiene como esposa a Skaði, la cazadora. Frey y Freyja son hijos de Njörðr: Frey rige la lluvia y el sol y se lo invoca para conseguir buenas cosechas, representa la fecundidad; Freyja es la diosa del amor.

Relación entre Æsir y Vanir
La distinción entre Æsir y Vanir es relativa. Se recalca el carácter guerrero de los primeros, y pacífico de los segundos. Hay dioses que pertenecen a los dos campos, y con frecuencia, se producen asimilaciones o divisiones entre deidades. Por ejemplo, antiguamente Frey y Freyja eran dos aspectos de una única deidad, que luego se separó. Más tarde, la popularidad de Freyja, el parecido de sus nombres y funciones hicieron que se confundiera con Frigg. Algunos estudiosos, entre los que se encuentra Georges Dumézil marca una diferencia respecto al carácter terrenal de la acción de los Vanir. En ellos encontramos incumbencias sobre la siembra, el clima y las cosechas. El carácter de los Æsir no deja dudas que se trata de dioses que se ocupan de cuestiones espirituales.
Un importante acontecimiento entre ambos grupos es el acuerdo de paz, intercambio de rehenes, y los casamientos que se efectuaron entre ellos después de una prolongada guerra, que finalmente fue ganada por los Æsir. Fue de esta manera como Njörd, el Van, vino a Asgard para vivir con sus dos hijos, Frey y Freyja, mientras que Hœnir, el As, el mismísimo hermano de Odín, hizo de Vanaheim su morada.
Algunos estudiosos han especulado que esta historia simbolizaba la forma en que los dioses de las tribus indoeuropeas habían suplantado a los dioses de la naturaleza, más antiguos, de los habitantes originales, aunque debe subrayarse que ésta es sólo una conjetura. Otros estudiosos consideran que la distinción Æsir/Vanir no es más que la manifestación noruega de una división de las divinidades en general entre los indoeuropeos, paralela a la de los olímpicos y los titanes en la mitología griega o a su vez en partes de la gran epopeya hindú, el Mahabhárata.

Los Jotuns
Los gigantes o jotuns (jötnar, iotnar, þurs, eotenas, etc.) son seres peligrosos para los hombres. Estos se pueden comparar con los titanes y gigantes de la mitología griega y generalmente se traducen como "gigantes", aunque "trolles" y "demonios" se han sugerido como alternativas útiles.
Son seres monstruosos y enormes, pero también sabios (como Mímir) y ricos, de los que se benefician los dioses en ciertas circunstancias. Están en el origen del cosmos (que se forma del cuerpo de Ymir). Algunas gigantes poseen una gran belleza (por ejemplo Gerðr).

Relación entre dioses y gigantes
Algunos de los Æsir son descendientes de los Jotuns y realizan matrimonios entre ellos. Algunos de los gigantes se mencionan por su nombre en las Eddas, y se muestran como representaciones de las fuerzas de la naturaleza. Existen dos categorías de gigantes: gigantes del hielo y gigantes de fuego. Éstos mantienen una hostilidad implacable con los dioses, que se materializa en luchas generalmente lideradas por Thor. En el Ragnarök las fuerzas de la destrucción estarán encabezadas por gigantes, como Surt y Hrym.

Otros seres sobrenaturales
Nornas
Las nornas (nornir) fijan el destino y sus decisiones resultan irrevocables. Quizás fueran muy numerosas en el pasado, pero en época escandinava (cuando son fijados los poemas y relatos) son tres principales; Urðr ("lo que ha ocurrido"), Verðandi ("lo que está ocurriendo") y Skuld ("lo que debería suceder"), residen en las raíces de Yggdrasill e hilan el destino de los hombres y en especial, con hilo de oro, el de los héroes.
Se relacionan a su vez con las dísir y las valquirias lideradas por Freyja, también divinidades relacionadas a aspectos del destino, concepto muy importante para estos pueblos.

Valquirias
Las Valquirias son importantes personajes femeninos. Eran hijas de Odín, y eran hermosas y fuertes guerreras con la capacidad de sanar cualquier lesión. Su tarea consistía en llevar al Valhalla a los héroes caídos en batalla. Allí les atendían sirviéndoles hidromiel y deleitándoles con su belleza. Las valquirias eran vírgenes guerreras (skjaldmö) y su residencia habitual era el Wingolf, situado al lado del Valhalla. Las valquirias eran comandadas por la diosa Freyja.

Enanos y Elfos
Los enanos (dvergr) resultan una raza especial puesto que son de género masculino y no se suelen reproducir (nacen de modo asexuado), viven bajo la tierra (Svartalfheim) y su ocupación principal es la minería y la metalurgia. Poseen la sabiduría oculta y sagrada que les permite forjar armas mágicas para los héroes y objetos muy poderosos para los dioses.
Los alfos o elfos (álfar), en la época escandinava forman dos grupos, los álfar de luz (ljósálfar), que viven en el cielo (la residencia de Frey se llama Alfheim) y los álfar negros u oscuros (svartálfar, dökkálfar) que viven bajo tierra y en montículos y tumbas, y que no se distinguen bien de los enanos (dvärgar). Aunque, seguramente en un principio su importancia era mayor, posteriormente se mantuvieron en las creencias folclóricas en una posición muy devaluada. La imagen noble de los elfos, altos y bellos, cayó en el olvido y se pasó a la concepción de elfo como criatura pequeña y traviesa, como la que aparece en las obras de William Shakespeare. La relación con los hombres es ambigua y pueden provocar enfermedades pero también favorecer. Se les dedicaba una importante ceremonia sacrificial que se llevaba a cabo a finales del otoño (el álfablót).
De ambas razas se dice que surgieron como gusanos de la carne de Ymir. Los dioses les dieron primero forma y les dotaron de una inteligencia sobrehumana, tras lo cual los dividieron en estas dos grandes clases.

Bestias
Entre otros seres sobrenaturales que se destacan en esta mitología se encuentran Fenrir, el lobo gigante, y Jörmungandr la serpiente marina que se encuentra rodeando al mundo. Estos dos monstruos son descritos como la descendencia de Loki y la gigante Angrboda. Criaturas más benévolas son Hugin y Munin (“pensamiento y memoria”), los dos cuervos que posee Odín, el dios jefe, que cuando vuelven de pasar por todos los mundos le susurran al oído todo lo que han visto, y Ratatösk, la ardilla que escala las raíces del árbol que sirve como eje del universo, Yggdrasil, y en el cual Odín se colgó de sus ramas durante nueve días para obtener conocimiento.

Cosmología Nórdica

La Cosmología escandinava se refiere a las creencias mitológicas que tenían los pueblos nórdicos sobre el origen y evolución del universo, así como las leyes generales que rigen el mundo físico, antes de la llegada del cristianismo.

El mito De La Creación
Según las creencias precristianas que aparecen reflejadas en poemas como la Völuspá y en el relato Gylfaginning el mundo se formó a partir de pocos elementos.

Frío y Calor
Al principio no había ni arena, ni mar, ni olas saladas, ni tierra por abajo ni cielo por arriba; el abismo no tenía fondo y la hierba no crecía en ninguna parte. El abismo original Ginnungagap se extendía entre el país de los hielos, de las tinieblas y de las nieblas, al Norte,y en el Sur, el país de fuego
Del choque y mezcla entre estas materias (una caliente y una fría) nacieron el mar, la tierra y las aguas. Doce ríos venidos del sur fluyeron hacia el país de los hielos, allí se cubrían de escarcha y morían en las inmensidades heladas. Éstos colmaron poco a poco el abismo.
Ymir
Las gotas de agua, vivificadas por el aire del Sur, se reunieron para formar un cuerpo vivo, el del primer gigante: Ymir. Al principio único ser dotado de vida, tuvo pronto la compañía de una vaca: Audumla, nacida como él en el hielo fundido. De la ubre de Audumla fluían cuatro ríos de leche, que nutrían a Ymir; ella se nutría de la sal contenida en el hielo que hacía fundirse lamiéndolo. De Ymir nacieron los gigantes.
Buri
Mientras Ymir bebía esa leche y multiplicaba sus fuerzas, ocurrió que la vaca hizo surgir, en las tibias gotas de leche que salpicaban los bloques de piedra cubiertos de escarcha, otro ser viviente, de forma humana: Buri. Esta primera divinidad, según otros relatos, nace de la condensación del sudor de Ymir. Sus cabellos fueron lo primero que tomó forma, luego la cabeza y luego todo el cuerpo. Buri, como Ymir, era capaz de reproducirse, y tuvo un hijo, Bor, que con el tiempo se casó con Bestla, una hija de gigante, descendiente de Ymir. Así, de manera, surgieron las razas de los gigantes y los dioses.
Odín y la creación del mundo
Los tres primeros hijos de la primera pareja son los tres primeros Ases: Odín, Vili (voluntad) y Vé (sacerdote). Los tres hijos de Bor se abalanzaron contra Ymir y lo mataron. Arrastraron su cuerpo inmenso por sobre el abismo. A partir del cuerpo despedazado del gigante, Odín, con ayuda de sus hermanos Ve y Vili, creó el universo.
De la carne de Ymir hicieron la tierra, de su sangre el mar y los lagos, de sus huesos las montañas y de sus dientes las rocas. Con su cerebro crearon las nubes y con sus cejas enmarañadas los límites del mundo. Con la parte cóncava del cráneo levantaron la bóveda celeste, que es sostenida por cuatro enanos llamados Norðri, Suðri, Austri y Vestri (los puntos cardinales). Los astros principales, el Sol y la Luna, giran perseguidos por lobos. Las chispas del Sol dieron origen a los demás astros. Los dioses regularon su curso, instituyendo así el ritmo de las estaciones, que hizo nacer la vegetación, y también la sucesión de los días y de las noches. La noche fue la primera, y de ella manó el día.
Enanos y seres humanos
Por decisión de los dioses, los enanos nacidos como gusanos de la sangre de Ymir tuvieron raciocinio, aunque quedaron condenados a vivir bajo el suelo y las piedras. Los primeros seres humanos fueron Ask (ash, fresno) y Embla (elm, olmo), que fueron tallados de madera y traídos a la vida por los dioses, Hœnir/Vili, y Lóðurr/Ve.

Esquema del Universo

Aunque hay incongruencias, por lo general, el mundo de los escandinavos está dividido en varios lugares conectados por un gran árbol llamado Yggdrasil.
Edda 9 Werelden.png
Los 9 lugares en los que se dividía el universo se distinguen por la terminación -heimr (hogar, reino, o mundo) y en algunas ocasiones -garðr (jardín o tierra).

En los últimos tiempos, la tendencia se inclinaba al nombrar los sitios de acuerdo con las criaturas que los habitaban. Las investigaciones enfocadas hacia las más antiguas fuentes sugieren que los nueve mundos eran designados con la terminación -heimr (por ejemplo Miðgarðr sería Mannheim, Ásgarðr sería Godheim) y eso haría que los nombres antiguos fueran tomados por los autores de la mitología al confundir ciertos lugares situados en los mundos, con los mundos en particular.
Además de Midgard los otros 8 mundos se pueden tomar como opuestos como se muestra en la imagen.

Mitología Nórdica



La mitología nórdica o escandinava comprende la religión, creencias y leyendas de los pueblos escandinavos, incluyendo aquellos que se asentaron en Islandia, donde las fuentes escritas de la mitología nórdica fueron reunidas. Es la versión mejor preservada de la antigua mitología germana, común a todos los pueblos germanos, que también incluye la estrechamente relacionada mitología anglosajona. La mitología germana, a su vez, ha evolucionado de una mitología indo-europea que era más temprana.
La mitología nórdica era una colección de creencias e historias compartidas por los pueblos germanos septentrionales. Es importante señalar que esta mitología no era compartida por los pueblos nórdicos de etnia urálica (fineses, estonios y lapones) ni báltica (letones), quienes poseían una propia. No era una religión revelada, pues no había una verdad entregada por los divinos a los mortales (a pesar que tiene relatos de personas normales aprendiendo las historias de los dioses de una visita de, o a, ellos), y no tenía un libro sagrado. Esta mitología era transmitida oralmente en forma de una larga y regular poesía. Dicha transmisión continuó durante la era vikinga, y nuestro conocimiento sobre ella está basado principalmente en las Eddas y otros textos medievales escritos durante o después de la cristianización.
En el folclore escandinavo, estas creencias duraron mucho tiempo, y en algunas áreas rurales algunas tradiciones han sido mantenidas hasta hoy. Otras han sido recientemente revividas o reinventadas como el neopaganismo germano. La mitología también ha permanecido como inspiración en la literatura así como en producciones escénicas o películas.

Mitología Romana

La mitología romana, es decir, las creencias mitológicas de los habitantes de la Antigua Roma, puede considerarse formada por partes. La primera, principalmente tardía y literaria, consiste en préstamos completamente nuevos procedentes de la mitología griega. La otra, mayoritariamente antigua y cúltica, funcionaba en formas muy diferentes a las de la equivalente griega.

Naturaleza De Los Antiguos Mitos Romanos
Los romanos no tenían relatos secuenciales sobre sus dioses comparables a la Titanomaquia o la seducción de Zeus por Hera, hasta que sus poetas comenzaron a adoptar los modelos griegos en el último lapso de tiempo de la república romana. Sin embargo, lo que si tenían, era:
Un sistema muy desarrollado de rituales, escuelas sacerdotales y panteones de dioses relacionados;
Un rico conjunto de mitos históricos sobre la fundación y auge de su ciudad por parte de actores humanos con ocasionales intervenciones divinas.

Mitología Antigua Sobre Los Dioses
El modelo romano incluía una forma muy diferente a la de los griegos de definir y concebir a los dioses. Por ejemplo, en la mitología griega Deméter era caracterizada por una historia muy conocida sobre su dolor por el rapto de su hija Perséfone a manos de Hades. Los antiguos romanos, por el contrario, concebían a su equivalente Ceres como una deidad con un sacerdote oficial llamado Flamen, subalterno de los flamines de Júpiter, Marte y Quirino, pero superior a los de Flora y Pomona. También se le consideraba agrupado en una tríada con otros dos dioses agrícolas, Liber y Libera, y se sabía la relación de dioses menores con funciones especializadas que le asistían: Sarritor (escardado), Messor (cosecha), Convector (transporte), Conditor (almacenaje), Insitor (siembra) y varias docenas más.
Así pues, la «mitología» romana arcaica, al menos en lo referente a los dioses, no estaba formada por relatos sino más bien el entrelazamiento y las complejas interrelaciones entre dioses y humanos.
La religión original de los primeros romanos fue modificada por la adición de numerosas y contradictorias creencias en épocas posteriores, y por la asimilación de grandes porciones de la mitología griega. Lo poco que se sabe sobre la religión romana primitiva no es gracias a relatos de la época sino a escritores posteriores que buscaron preservar las viejas tradiciones del olvido en el que estaban cayendo, como el estudioso del siglo I a. C. Marco Terencio Varrón. Otros escritores clásicos, como el poeta Ovidio en sus Fastos (‘calendario’), fueron fuertemente influidos por los modelos helenísticos, y en sus obras se recurre con frecuencia a las creencias griegas para rellenar los huecos de las tradiciones romanas.

                                                Romulo y Remo, amamantándose por loba.


Mitología antigua sobre la historia romana

En contraste con la escasez del material narrativo sobre los dioses, los romanos tenían una rica panoplia de leyendas sobre la fundación y primera expansión de su propia ciudad. Además de estas tradiciones de origen mayoritariamente local, a este surtido se injertó material procedente de las leyendas heroicas griegas en una época temprana, haciendo por ejemplo a Eneas antepasado de Rómulo y Remo.
La Eneida y los primeros libros de Livio son las mejores fuentes exhaustivas para esta mitología humana.

miércoles, 2 de octubre de 2013

Mitología Griega



La mitología griega es el conjunto de mitos y leyendas pertenecientes a los antiguos griegos que tratan de sus dioses y héroes, la naturaleza del mundo, los orígenes y el significado de sus propios cultos y prácticas rituales. Formaban parte de la religión de la Antigua Grecia. Los investigadores modernos recurren a los mitos y los estudian en un intento por arrojar luz sobre las instituciones religiosas y políticas de la antigua Grecia y su civilización, así como para entender mejor la naturaleza de la propia creación de los mitos.

La mitología griega aparece explícitamente en una extensa colección de relatos e implícitamente en artes figurativas tales como cerámica pintada y ofrendas votivas. Los mitos griegos intentan explicar los orígenes del mundo y detallan las vidas y aventuras de una amplia variedad de dioses, héroes y otras criaturas mitológicas. Estos relatos fueron originalmente difundidos en una tradición poética oral, si bien actualmente los mitos se conocen principalmente gracias a la literatura griega.

Las fuentes literarias más antiguas conocidas, los poemas épicos de la Ilíada y la Odisea, se centran en los sucesos en torno a la Guerra de Troya. Dos poemas del casi contemporáneo de Homero, Hesíodo, la Teogonía y los Trabajos y días, contienen relatos sobre la génesis del mundo, la sucesión de gobernantes divinos y épocas humanas y el origen de las tragedias humanas y las costumbres sacrificiales. También se conservaron mitos en los himnos homéricos, en fragmentos de poesía épica del ciclo troyano, en poemas líricos, en las obras de los dramaturgos del siglo V a. C., en escritos de los investigadores y poetas del período helenístico y en textos de la época del Imperio romano de autores como Plutarco y Pausanias.

Los hallazgos arqueológicos suponen una importante fuente de detalles sobre la mitología griega, con dioses y héroes presentes prominentemente en la decoración de muchos objetos. Diseños geométricos sobre cerámica del siglo VIII a. C. representan escenas del ciclo troyano, así como aventuras de Heracles. En los subsiguientes periodos arcaico, clásico y helenístico aparecen escenas mitológicas homéricas y de otras varias fuentes para complementar la evidencia literaria existente.

La mitología griega ha ejercido una amplia influencia sobre la cultura, el arte y la literatura de la civilización occidental y sigue siendo parte del patrimonio y lenguaje cultural occidentales. Poetas y artistas han hallado inspiración en ella desde las épocas antiguas hasta la actualidad y han descubierto significado y relevancia contemporáneos en los temas mitológicos clásicos.